No podrán PROHIBIR mi esperanza
Verbo horrible, nunca le tuve simpatía. Junto con Osvaldo criamos cuatro hijos maravillosos y nunca estuvo presente en nuestro "contrato de convivencia familiar". ¿Por qué? Porque siempre creímos que no sirve para nada.Todos sabemos que es lo que está bien y que lo que está mal.Y, cuando surgen dudas, se desmenuza hasta llegar al acuerdo entre las partes.
De otra forma, seria solo un paliativo temporario y en poco tiempo el problema reaparece y con más potencia.
Hasta aquí, mi utópico deseo que la dirigencia se manejase con el mismo concepto. Hasta hace un tiempito pensaba que eran INEPTOS, ahora creo fervientemente que son CÓMPLICES. Y, por lógica, no les conviene terminar con esta realidad.
Las barras, a mi entender, son solo instrumentos de unos diez (no creo que sean muchos mas)
TITIRITEROS de trajes y corbatas italianas que manejan todo a su antojo. O, tal vez ,son los que han creado al "monstruo" y ahora se les fue todo de la mano. Cuando me desayuné con la noticia de la prohibición del público visitante en nuestras canchas, me acordé de las veces que me INCAUTARON mi triste cajita de fósforos Fragata (obvio que hace años que no llevo encendedor...)¡¡¡¡¡A MI, RIDÍCULOS!!!!!...
Pero nunca podrán QUITARNOS la esperanza. Nos toca bailar con una muy fea, pero YA SE LES ACABA. ¿saben por qué? Porque las generaciones que vienen son MEJORES. Porque cada vez son mas los que entienden que el equipo contrario es tu rival circunstancial y no tu enemigo mortal. Porque cada vez son mas los que cantan y alientan a su equipo sin pedir la muerte del club al que enfrenta. Porque lo veo en mi nieto Francisco, de doce años, que no corea canciones de guerra, no porque se lo tengamos PROHIBIDO, sino porque "no las siente".Porque por cada uno de los barras, hay cientos de pibes como Vico, quién con sus 23 o 24 años acaba de convertirse en Licenciada en Comercio Exterior a puro esfuerzo y que ama al Globo.
Todos conocemos la existencia de los barras, pero también están las Vico, los Lauti, los Brian, las Silvi, y son más. Porque por cada dirigente inepto o corrupto hay muchos ,como Juancho, que sueña con ser presidente del club de sus amores para llevarlo a los mejores lugares...
LOS BUENOS SOMOS MÁS Y MEJORES...
Ineptos, deshonestos, inútiles y títeres: ¡¡¡les queda MUY poca cuerda!!!!!
Estoy segurísima que en no mucho tiempo, ganaremos los buenos.
Promesa quemera, ¡eh !
Abrazo.
Patricia de Michele
@patodmi
