lunes, 24 de octubre de 2016

¿Quién tiene la culpa?

Apenas 6 puntos en siete jugados. Ni siquiera tenemos un gol por partido. Ocupamos la posición 22 sobre 30 equipos. Arrancamos pensando en la Sudamericana y ya miramos con miedo la tabla del descenso. Jugamos ante equipos de mismo calibre que nos superaron en fútbol y estado físico. Se vienen los rivales jodidos. ¿Quién tiene la culpa del presente de Huracán?
Alejandro Nadur es la máxima autoridad del club y por lo tanto tiene la máxima responsabilidad. Eduardo Dominguez preparó en lo físico a este equipo y su trabajo resultó ser muy malo. Los jugadores bajaron su nivel y demostraron poca actitud en varias situaciones del juego. Caruso Lombardi prueba en el torneo lo que no pudo hacer en la pretemporada. 

Todos tienen excusas: el Presidente, con razón, admitió que "el club no está en condiciones de traer jugadores como Lucas Barrios" pero no planificó un Plan B, se peleó con Dominguez, trajo jugadores con muy poco lapso para la adaptación, mal en lo físico y gastó tiempo y dinero en Profesionales que no están capacitados para el fútbol argentino. 

El ex entrenador se quejó siempre de la falta del 9. Nunca se interesó por juveniles (Nadur/Sasso tampoco le exigieron) y solicitó jugadores, con razón, para dar un salto de calidad pero IMPOSIBLES para la economía de Huracán (Triverio/Caraglio/Barrios). Si bien es cierto que entró mucho dinero a las cuentas del club, son futbolistas de buen nivel en México, con sueldos altísimos y que no vendrían a la institución por más que nosotros la queremos mucho. Nunca escuché UNA SOLA AUTOCRÍTICA de Dominguez. Ni siquiera cuando lo superó en lo físico un equipo de la Primera C (Central Córdoba de Rosario).

Los jugadores viven diciendo en la arenga previa que van a dejar todo. En el partido comenten errores infantiles o negligencias como tirar una patada al pecho del rival dentro del área. Prometen mejorar y cambiar la página para el fin de semana siguiente (no sucede). El único partido que funcionaron como equipo fue en Tucumán. Ellos dicen hacer los que les pide el entrenador. Pero se ofendieron ante diversos cambios que quisieron inyectar desde el nuevo cuerpo técnico.

Caruso Lombardi llegó, se animó ante Atlético Tucumán, ganó y apareció en muchos medios. En ese entonces, todos los hinchas éramos felices con sus apariciones. Luego repitió ante Temperley y el equipo fue un asco. "Jugamos muy mal", admitió. Tuvo otra oportunidad ante Gimnasia. Pensó más en defender que en atacar y sacó al equipo del esquema defensivo cuando la cosa estaba 0-1. Su excusa fue el árbitro que cobró un PENALAZO en contra. Para los hinchas, Caruso ya no es más gracioso y tiene que trabajar más y hablar menos.

Todos estamos confundidos. Queremos jugar como Menotti (la melancolía constante aburre, cansa) pero queremos ganar como sea (supuestamente hacía eso Bilardo). En situaciones límites queremos a Caruso pero cuando asumió lo tildaron como "el peor entrenador que tuvo Huracán" cuando pasaron, por lo menos, 20 tipos que no estaban a la altura del club. O tal vez sí: a veces olvido que siempre fuimos muy desprolijos y poco serios a la hora de trabajar. 

Huracán inició mal su camino con una PÉSIMA pretemporada. El Presidente tardó en traer al delantero titular pero hizo bien en comprar los pases de Romat, Ángulo, Bogado y Mendoza. Dominguez hizo bien en exigir pero cuando algo no le gustó, comenzó a preparar su salida (lo más elegante posible) para no quedar como el único culpable. Los jugadores pasaron de tener un entrenador que cerraba puertas a otro que las abría. 
No hay un hilo conductor. Nadur deberá presenciar más entrenamientos y ver él, con sus propios ojos, que es lo qué pasa en cada práctica. No puede hacer todo sólo. Pero, lamentablemente, varios de sus compañeros del oficialismo (lista que conformó) son GRANDES opositores que se alegran por este presente y se esconden en las redes sociales para criticar, justamente, cuando Huracán pierde.
¿Tenemos tiempo para cambiar? Sí. El presente es complicado. El futuro puede ser peor. Piensen un poco más en Huracán. Sean hinchas de la camiseta. Seguimos, TODOS,  sin aprender de los errores. 

Juan Manuel Penalba
@JuanchoPenalba