Desde los 80´que Huracán es una institución cangrejo: siempre va para atrás, retrocede. Los que manejan al club priorizan sus bienes personales y no lograr un club modelo. Huracán nunca tiene un proyecto serio y un pensamiento a futuro. Su situación es la del día a día para ir zafando como pueda. Y así estamos: una Sede que tiene lo que tiene por el amor de la gente que trabaja allí, una Quemita en mal estado y descuidada y un estadio cada vez más vacío por los malos resultados. Siempre insistimos con un cambio urgente de mentalidad porque este equipo está en descenso permanente y no me da miedo jugar con Boca Unidos, Belgrano o Ferro, siento que Huracán puede llegar a jugar con Flandria, Barracas Central o Temperley. Carlos Babington debe presentar su renuncia y la oposición debe consensuar y alcanzar algo utópico en Parque Patricios: la unión de todos para sacar adelante a la institución. ¿Cómo le puede ir bien a Huracán, si en las elecciones van dos mil socios a votar y hay 5 listas? Lo peor es que todos nos enamoran con sus falsas promesas que coinciden entre los diferentes partidos políticos. Pero ahí está el negocio de ellos: llevar agua para su molino. Necesitamos con obligación un plan para salir de esta horrenda y triste situación. Los mejores cerebros de cada movimiento político deberán debatir y pensar lo mejor para Huracán. Es la única manera para ser un poco más serios.
Con respecto a lo de ayer, me dio vergüenza el equipo, la policía y la mafia que lleva las banderas. Es increíble que para ver fútbol, los oficiales te revisen tres o cuatros veces antes de entrar y la barra haga lo que quiera como si fuesen los dueños del circo (lo son). En cuanto a lo futbolístico, Monzón se contagió de los demás y tuvo un error muy grosero y la defensa, volviendo a nombrar al circo, son cuatro payasos.
Me gustaría jugar la promoción, pero más me gustaría ver un club sano, con ideas. Si el descenso me da eso, bienvenido sea.
Juan Manuel Penalba
socio A 15073.