Huracán venció a Crucero del Norte y se volvió a meter en
puestos de ascenso.
Cuando el caos se adueñaba del club y hasta el mismísimo presidente afirmaba que las chances eran sólo “matemáticas”, el globo dio una muestra de carácter. Los aplausos se los deben llevar los pibes; los líderes aparecieron, es cierto, pero luego de haberse “borrado” en las primeras 15 fechas.
Cuando el caos se adueñaba del club y hasta el mismísimo presidente afirmaba que las chances eran sólo “matemáticas”, el globo dio una muestra de carácter. Los aplausos se los deben llevar los pibes; los líderes aparecieron, es cierto, pero luego de haberse “borrado” en las primeras 15 fechas.
Con el apoyo de @mftattoo, los puntajes de la victoria del
globo:
Díaz: 5 – Completó un correcto partido, sin intervenciones
decisivas, pero con mucha sobriedad para contener cualquier balón suelto e
inteligencia para manejar los tiempos. Si bien mostró el coraje habitual, dudó
en algunos balones parados. En un momento tan caliente, necesitábamos tener una
figura que infunda seguridad a los defensores y Marcos lo cumplió a la perfección.
Buen retorno.
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Mancinelli: 5 – En la primera mitad fue el defensor más
vulnerable, siendo su sector el que más se vio comprometido por los avances de
Crucero del Norte quien, bajo la lanza de Cólzera, desbordó y llevó peligro a
la última línea del globo. Luego, en la segunda parte, se afianzó y respondió
con mucha fiereza en todas las ocasiones en las que lo probaron, despejando
una innumerable cantidad de pelotazos que enviaba el conjunto misionero, que estaba apremiado
por poner el marcador en tablas.
Erramuspe: 6 – Hoy fue un bombero más de una defensa que
poco le importó la prolijidad y el juego vistoso, y que clausuró con mucha
providencia todo atisbo de reacción del conjunto dirigido por Gabriel Schurrer.
Sin miramiento alguno, el ex Lanús se encargó de terminar con cualquier intento
de Crucero.
Domínguez: 6 – Nuevamente, realizó un buen trabajo en la
zaga central, casi sin errores. Este “nuevo retorno” lo signó para bien y
demostró que a pesar de los años, cuando se lo propone, puede reunir todos las condiciones necesarias para ofrecer una labor sólida y no ser superado por los atacantes rivales.
Arano: 5 – Con tenacidad y vigor se las ingenió para incomodar
a los extremos de Crucero. Si bien por momentos fue imprudente –la falta
cometida en el descuento lo demuestra–, pudo completar un correcto encuentro,
en el que al menos no le facilitó las cosas al rival.
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Villarruel: 6 – Nuevamente, su trabajo silencioso de
“pressing” fue indispensable y en todo momento estuvo atentos en los relevos;
cortando, recuperando y agobiando a los rivales en todos los sectores de la
cancha. Correcto encuentro del motor del conjunto dirigido por Néstor Apuzzo.
Vismara: 6 – El mejor partido desde que viste estos bellos
colores. Esta vez fue el bastión del mediocampo y logró disimular su andar
cansino ubicándose bien en la cancha, recuperando una buena cantidad de balones
y demostrando que puede jugar con una intensidad mayor a la que exhibió hasta el momento. La distribución aún
continúa siendo su deuda pendiente, ya que abusa de la pausa y se desplaza con
movimientos anunciados, lo que le facilita la recuperación al rival.
Toranzo: 6 – Desarrolló un partido inteligente, siendo el
autor intelectual del primer tanto. A lo largo del partido, se encargó de
distribuir el balón y de asistir a sus compañeros, sin demasiada intensidad física, es
cierto, pero poniendo en práctica todos sus atributos técnicos, su calidad, su inteligencia y su
experiencia para elegir los pases más productivos para el equipo y, a
su vez, utilizando sus dotes actorales para desplomarse ante el más mínimo contacto, frenando el juego y dificultando, de esta manera, los planes del conjunto misionero, que buscaba
acrecentar la intensidad del juego.
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Espinoza: 9 – Nuevamente, la figura del globo. Me niego a creer que sólo tenga dos pulmones.
El pibe, incansable, se movió por todos los sectores de la cancha, siendo una
alternativa constante y facilitando, de esta manera, la circulación del balón,
la fluidez del juego y la conexión del equipo. Cristian es una variable indispensable, ya que asiste, desborda, corre, genera y le da explosión al juego
de Huracán, que por momentos es pausado. Hoy consiguió lo único que le faltaba
para que podamos afirmar que su trabajo es perfecto: el gol. Sin dudas es el mejor jugador que
tiene el conjunto quemero. Chapeau.
Ábila: 6 – Aguantó, pivoteó, peleó, luchó y se sacrificó en
pos del equipo. En el primer tanto se conectó con Espinoza para que éste,
posteriormente, ponga el 1 a 0. Buen partido de Wanchope, que en
esta ocasión no abusó de la posición prohibida y fue una buena referencia en el
ataque.
Martínez: 6 – A pesar de que no se lució, hizo un buen
trabajo, aprovechando su velocidad y su ímpetu para profundizar sobre la
banda izquierda y, a la vez, para aparecer en otros sectores de la cancha y asociarse con sus compañeros. Ejecutó un notable tiro libre que Caffa tapó magníficamente y luego un
potente remate que golpeó en el travesaño y que luego picó adentro del arco, pero no fue convalidado por Baliño.
Suspirabas,
pues amanecía en aquella urbe
degradada por el tiempo,
El sol se inmiscuía tímidamente
entre tus dedos
Producíase un atisbo de reflejo
apenas una leve brisa,
Y allí estabas tú...
resistiendo,
aferrado a aquella antigua ensoñación
Convencido,
Y allí estabas tú...
resistiendo,
aferrado a aquella antigua ensoñación
Convencido,
pues sabíase en su pueblo
que a aquel que sueña
el viento siempre
le trazará los caminos correctos
